miércoles, 15 de mayo de 2013

Justo en la frontera

Donde la primavera roza el invierno,justo en la frontera,notas una caricia inusual como si se detuviese el tiempo. Allí es el lugar donde se precipitan todos los sueños,arden todos los latidos y confluyen todos los vientos.En ese mágico  rincón,una flor puede estar aterida de frío al estar cubierta de nieve de los pétalos a su tallo y sin embargo sentir el rayo de un sol q la derretirá con su calor etéreo.Desde allí verás las barbas blancas del viejo de la montaña y al mismo tiempo a las campanillas repicar las alegrías florecidas y muy cerca a los pensamientos resistirse a cualquier helada.

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