Se han convertido en la feria del trece,de-ambulantes,pasajeros,más tipo me ha tocado la chochona y practican el tiro al plato,vamos que apuntan cada detalle que ya no se dedican,sin miramientos,para darse en el blanco de sus sentimientos,donde más duele.
Atracción hay,a veces ella se siente en una montaña rusa o él nota que su vida es como una noria.Los dos están en un laberinto del que es complicado salir,notan como si estuviesen en caída libre y apunto de sacarles una foto que les saldrá cara en su álbum poco familiar como recuerdo.
Fueron demasiado rápido y no supieron disfrutar de lo que les ofrecía el camino,ni se dieron cuenta que no se tenían en cuenta.Son ahora turistas el uno para el otro,al principio fue un placer recorrer el viaje juntos,ahora se sienten como de visita,alguien de paso,el todo incluido se acabó.Se han vuelto mono-temáticos como algunos parques,discusión tras discusión,silencios tras silencios y se perdieron en el lejano oeste de sus caricias después de haberse levantado la gran muralla entre ellos.
Están cansados de caminar tanto,necesitan sentarse un momento,no paran quietos,se fastidian continuamente como niños...de cuarenta y tantos.Se hicieron de noche y siguen como si estuvieran en un parque,se terminó la diversión,ya no comparten ni las risas.
Es hora de retirarse,de asumir que han crecido demasiado para seguir peleados por quien es el primero en decirle al otro que ya no te quiero. Hay veces que es mejor saber cuando hay que parar y bajarse de la atracción que ya no sientes ni quieres.Y hace tiempo que se les caducó el vale descuento.No se puede convivir sin tener ya que decirse,solo unidos por la fuerza ya escasa del cariño.Encasquillados y desgastados,les queda a cada uno seguir su camino por separado y dejar de comportarse como niños...malcriados de cuarenta y tantos.
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