domingo, 22 de diciembre de 2024

La buena cosecha de la Na-VIDA-d

Di-siembre / Di:siempre/ No seseo, solo es ese mes en el que la nostalgia parece estar más sembrada.

Y tengo miedo a olvidar lo que fue certeza...son muchos los recuerdos que me rodean no que me rondan. No es nada sencillo crecer y mantenerse si no eres como esos robles. Yo no alcanzo ni a ser un arbusto,por mucho que algunos me consideren como un junco...

Diciembre siempre fue un mes mágico para mi familia como en tantas supongo...Mis padres lo hacían único,nos regalaban días extraordinarios, no solo en este mes pero desde luego era pura Na-VIDA-d. En nuestra casa el Gordo que nos tocaba era la fortuna de tener la bondad infinita de mi padre tan Giacometti y a la dulzura gruesa de mi madre.

Ella adornaba hasta los cuadros con guirnaldas y ponía el Belén, que no lo armaba, porque siempre fueron muy pacíficos,el Belén y ella.

Tenía su musgo ,su río con papel de plata,su puente,sus animales,sus pastores,las lavanderas,los Reyes Magos se intuían a lo lejos,el ángel y ese pesebre entrañable...era realmente hermoso.

Y el abeto nos lo daba un vecino,el mejor de los vecinos buenos,era enorme y después lo volvían a plantar y siempre decorado con exceso mágico. En él ponía desde el huevo hecho por mi hermano en el colegio que tenía lana roja como cabello y una cara feliz pintada en su cáscara ... También colgaba de una de sus ramas esa figura de pan que hacía en mi escuela por el día de la madre pintada por mis menudas manos.

Había adornos de cada uno de sus hijos hechas por ellos,una nuez, recuerdo, con algodón...y luego de sus nietos, aparte de los típicos navideños y la estrella en lo alto,recuerdo cómo me aupaban para colocarla al final de todo.

Y sonaban hasta villancicos como lo hacía la megafonía de mi colegio por estas fechas en los días previos a las vacaciones escolares.

Por otra parte fue la primera vez que supe lo que era una comida de empresa,la que tenía mi padre, en realidad eran unos pinchos y un brindis por Navidad.

Y recuerdo lo que me encantaba ir a la oficina en la que trabajaba mi padre,bueno su trabajo era más de estar en la calle pero allí tenían el almacén con los productos farmacéuticos,con un montón de folletos y unos blocs que me gustaban mucho igual que el olor que desprendía el sitio. Suena raro para lo pequeña que era pero me parecía un sitio especial,donde correteaba y dibujaba con mi imaginación.

No eran felices fiestas,eran más que eso. Los anuncios de Navidad me emocionaban,sobre todo, el del Almendro porque suponía que mis hermanos volvían a casa por Navidad, eran mis turrones favoritos,mis hermagos, uno volvía de la mili y los otros dos de estudiar fuera, en Madrid. Y el primogénito ya casado(aunque obviamente lo veíamos más a menudo) de alguna manera también regresaba. Mi madre se ponía tan feliz que se disipaba toda nube que pudiese sentir dentro de ella.

Lo mejor la Nochebuena,el calor de la cocina y la calefacción de los altos hornos que suponía tenerla central, hacía que nuestras mejillas se pusieran coloradas. Mi abuela materna y mi madre a los fogones era una auténtica maravilla,con muchos pinches improvisados. Allí todos hacíamos algo para ayudar.

Fue más o menos con siete años cuando empecé la tradición de leer en alto un especie de relato escrito por mí para todos,era como mi regalo, mi dar las gracias por sentirme afortunada de pertenecer a una gran familia, algo que hice durante muchos años en cada ocasión que celebrábamos la vida.

Lo malo es que ahora que todo eso se ha disipado, necesito apagar ciertas dudas,cerrar algunas de sus puertas,son muchas las preguntas que no tienen ya respuesta fácil. O sí...es la pura vida cuando es blanca como la nieve al caer que todavía no se ha ensuciado con pisadas que luego se queda manchada y al final se derrite y es solo hielo y te puedes resbalar y caer.


Estoy tan agradecida a mis padres y a mis hermanos por haberlo hecho posible cada diciembre aunque sepa que nunca nada volverá a ser como antes,tal vez diferente pero no cómo lo que acabo de contar. Ojalá lo hubiera sabido en aquellos momentos inolvidables gracias a mis certezas tostadas 0.0 y a mis hermagos mayores. Di siembre quien siembre siempre, recuérdalo !!!

miércoles, 18 de diciembre de 2024

Un tsunami de silencio

Papá y mamá tengo que deciros algo...que respiran mis latidos cojos,que me ha vapuleado como sabéis ese miedo tan grande que era quedarme sin vosotros.

Ya no hay lugares ni grandes ni pequeños que me buscabais para detener el gruñido de mi hiriente oso,no encuentro ni vuestro bello poso,quizás en vuestras nietas un poco, pero sí mucho de un lodo vacío que me trastoca del todo,me cambia algunos recuerdos de sitio, me desafía con improperios macerados en amargo licor que bebo, me saca de las puertas el quicio y un jurado me declara culpable por ser cobarde y un vulnerable delito.

Tengo maniatadas las lágrimas por unas pastillas de frenar en seco pero me disparan la angustia que siento, los tobillos se me aflojan y es de extraño hormigón, el muro que retiene mis emociones,dentro de un puño cerrado mi corazón,solo que el puño no es mío y es violento y frío, como si se hubiese vuelto el invierno un loco derribado,como si el amor a la intemperie estuviese hecha de esquinas sus invisibles paredes de mármol más que inquieto se hallase y más varada y helada me hundiese, qué ardua tarea es lidiar con la desdeñable de-presión.

Necesito deciros que estoy con el corazón tan triste y soy un marrón que me siento nadie sin vosotros, que las series que veo quiero compartirlas como siempre hacíamos los dos,hay algunas que te hubiesen encantado papá como hablar de tanto hasta las tantas y las buenas noches que nos decíamos era un bello nosotros y cómo me contaba mamá lo que le gustaba que le hiciese bizcocho.


A Riazor ni me acerco ni a su viento me asomo y si cruzo la calle a ciegas ,es para que me atropellen la vida de otros.

Tantas veces siento que mi esencia se fue con vosotros, la belleza que tenía yo en vuestros ojos, la valentía que respiraba mi aliento en el vuestro, la risa de nuestros buenos momentos, la caricia dispuesta en vuestras manos y a mi espalda solo vuestros mullidos besos para resguardarme de los que atacan por detrás tan perniciosos, vuestro amor era incondicional y tan hermoso.

En mi retina hay un cinexin deteriorado, parpadeo recuerdos para arreglarlo y solo veo a un ratón con guantes blancos y a un perro naranja muy raros. 

Pero en mi mente escucho voces cálidas y un pasillo largo,son las vuestras que nos dicen que empieza la sesión de tarde y que se ha vuelto a estropear el lavavajillas y el agua campa a sus anchas en la cocina mientras mi memoria se empapa de los hermanos Marx y de Harpo con su bocina.

Papá y mamá os hablo desde este silencio Tsunami que me tiene atrapada entre las sábanas en-calladas y la sabana nada africana como un invernadero de cenizas porque ya en mí suena infinita la nada. Y lo peor es que no quiero ser un fraude para los dos,imagino lo que me diríais para salir de donde estoy pero un inevitable silencio jadea inmenso a mi alrededor.

viernes, 13 de diciembre de 2024

Regatos pequenos(2)

Palabras salidas de un crucigrama : Canoa, RDA, apnea, crudo, naipe,opera, pie, unión, oír y ADN.

" Estoy en la sombra,en la sombra de lo que fui y me vienen pensamientos en alemán,absurdo, lo sé pero mis despropósitos del año nuevo no ayudan. Sin pretenderlo, regreso a la época de la RDA,que de democrática no tenía mucho. Me pregunto porqué denominar a aquella guerra... fría como si las demás no lo fuesen. Lo que hay que oír...  En los conflictos todos pierden y nada importa ni los nombres de los muertos,si tenían algún hermano o amigos buenos,si les cojeaba el pie izquierdo o latió emocionado su corazón al ver por primera vez a su nieto, si saltaron alguna vez de alegría...o se estremecieron con el primer beso.

Y después dicen que la unión hace la fuerza pero tampoco es verdad,estamos en nuestra irreductible canoa como si fuese una aldea gala. Nave(va)gamos en ella como si los demás no lo hiciesen tan bien como nosotros,lo llevamos en el ADN,unos más que otros. Hay que encontrar un lugar donde enterrarse definitivamente el ombligo.

Pero al crecer la sombra en la que te encuentras, te asaltan irascibles las dudas y en ese momento de crecida, tu noche se retuerce y lo tienes crudo,como notar petróleo y su olor que impregna tu incendiario miedo que ha estado en apnea demasiado tiempo y logra al final dejarte sin respiración a ti y con esa sensación de desazón cruel como si te opera un Jack el destripador y  sientes que se te encoge tan fuerte el corazón hasta que estalla en lágrimas y ese tipejo se saca de la manga un naipe,que precisamente no es un as,si no el siete de espadas que te rasga por fuera, por dentro. Y te diluyes en otro regato pequeno... éste muy ensombrecido".

martes, 10 de diciembre de 2024

Regatos pequenos

Os pongo en situación. Vamos a jugar como si fuésemos niños y saltásemos sobre los charcos que nos encontrábamos en el camino a casa.Charcos como palabras, siete mínimo y quince máximo. Haremos un relato con esos charcos para llegar a nuestro hogar.Seguramente os recordará a vuestra etapa escolar cuando nos pedían hacer esto en lengua.

Será en galego,unha viaxe polo noso mollado idioma cheo de regatos pequenos.

Palabras : tempas, fardel, requichado, rancor, melindres,laio e trousar. A mayores puedes usar estas si quieres saltar más charcos : axexar, prófugo, codia, gabia, rexouba, avezar, reliquia e amolecer. 

A camiñar polos regatos pequenos como Dorothy polas baldosas amarelas !!

1) "Aquela noite ía no automóbil tan vello do meu avó que el coidaba coma unha reliquia. Antes de marchar,eles dixéronme que tivese moito coidado coma se soubesen que algo estivera a piques de axexar.

Chovía moi forte, diría que case con rancor. De súpeto perdín o control do coche, semellaba un prófugo que fuxe sen amolecerse por nada. Sentín un arrepío que percorreu o meu corpo e polas tempas esvaroume unha suor fría. Fixen o aceno de afastarme da gabia pero non puiden. Alí quedei cos ollos pechados durante un tempo.Cando os abrín,soltei un laio,doíame o pé que o tiña requichado e iso que estaba avezada a non chorar. Entráronme gañas de trousar os melindres que comera antes de iniciar a viaxe e unha pequena codia de pan. Collín do fardel o meu móbil,chamei a emerxencias pero non escoitaba ben,soamente a rexouba do vento".


2) "Parecía que estaba a axexar un laio dende a gabia ,non soamente chea de corpos, tamén de rancor. Fixen o aceno de afastarme ata a estrada porque me percorreu un arrepío ao ver esa imaxe e entraronme gañas de trousar.As miñas tempas latexaban con forza,ademais non me sentaran ben os melindres que comera despois de tanta codia á que estaba avezada nesta guerra que parecía amolecer ata a xente máis forte polo medo requichado que pasaran e aínda máis se eu era un prófugo que sempre escoitaba certas rexoubas de persoas que pasaban preto de min.O fardel que levaba ao lombo xa non me pesaba,nel levaba unha reliquia da miña nai que me traía recordos dos bos tempos".
















sábado, 7 de diciembre de 2024

Insomnis

Ahora mismo estoy en una cuneta,en la madrugada de una cuneta. Siento frío aunque no tanto como el día en el que nos quedamos sin nuestros padres.

Hay delirios de noventa caballos que pasan con exceso de velocidad por mi lado y a lo lejos está la vida que empieza a llover...la vida cuando era niña. 

Nunca tuve insomnio de pequeña,mi madre me decía que soñara con los angelitos y me quedaba prácticamente dormida al instante.

Cuántas veces pude oír lo del sueño reparador,yo imaginaba que era como un zapatero, pero remendaba las huellas,no los zapatos. "Hay huellas que aprietan,no es solo el calzado"-pensaba. Pero eso lo sé ahora,de adulta venida a menos y de tiempo venido a más, está carísimo...el tiempo es oro,lo sabes si empiezas a menguar a la velocidad del rayo que no cesa.

Mis sueños parecían,en ocasiones, de pintor,no de brocha gorda si no gruesa, generosa,un Kandinsky, un Van Gogh,un Klimt, un Renoir....o de algún buen samaritano que coloreaba mis noches . Muchas veces, de niña, pensaba que los sueños eran hechos por artistas,artesanos de lo imposible, orfebres de piedras preciosas y paisajes inverosímiles. Los escritores también como mi hermano que inventaba en la oscuridad de mi cuarto historias mágicas para dormirme princesa.

Mi padre tenía el poder de cogerte la mano y su tacto único,de corazón blanquiazul me calmaba; era un bálsamo como si te agarrases a la vida que emanaba de su ser,como en esos videojuegos en los que obtienes vidas extra. Mi madre dulce me hablaba como aquellos ángeles con los que me decía que me durmiera. A mi padre le gustaba que le dijese que soñara algo bonito y me contestaba que entonces lo haría conmigo.

Duele estar en la cuneta,huele a gris y semeja de lija la noche y áspera su oscuridad hasta sangrar y dejar en carne viva su azabache. Todos sabemos lo que estar en la cuneta con los ojos tan abiertos que te raspa como un afilado despropósito el parpadeo del sueño cansado que no llega,que ha tropezado nada más echarte en cama,ese sueño torpe y zascandil con miles de incómodos bostezos que no llevan a nada.

El miedo obviamente no ayuda y se jacta de aparecer en estas situaciones como metementodo que es, tramposo y noctámbulo, un entrometido trilero al dente y pone la zancadilla cuando menos te lo esperas. Te engaña...así asusta a la pequeña valiente que llevas dentro y apaga con fiereza tus sueños.

Ya no viene mi madre a hablarme, mi padre ya no puede decirme que soñará conmigo...están en el lugar donde los árboles más frondosos y blancos crecen en las nubes de algodón de azúcar. Nunca fui tan madre como lo soy ahora. Se borran las generaciones de un plumazo y lo peor es que nunca seré ni la cuarta parte de madre buena que fue la mía conmigo.  Soy una copia mala de un falsificador barato, será el síndrome ese del impostor que se ha puesto de moda... qué curioso cuando es algo que existió desde siempre por culpa de la baja autoestima y la gran auto- exigencia  que uno tiene con respecto a sí mismo. Y por qué no hablan del de Dunning- Kruger,el creerse más de lo que eres o de lo que sabes. Perdón por el inciso...la profesión va por dentro.

Vuelvo a mi insomnio,a mi ombligo que tirita, demasiada responsabilidad ser madre,diría hasta adulta ,más si estás sola y en la cuneta como en este impreciso instante.La intemperie te atrapa al fallecer tus padres,ahí empiezas a valorar el significado de la palabra hogar, aunque en mi " nicaso" siempre tuve la certeza que sería así y siempre le otorgué valor/es.

De las pesadillas mejor no hablar si eres soñambulista y estás en la gavia de la madrugada, insomne perdida en los alrededores de una nostalgia que no quiere bañarse en lo melancóholico de la vida bebida. Sabe que se quedará varada en la arena del buen tiempo que huyó y como no fue enemiga,no sirve lo del puente de plata y menos a eso de las tres de mañana. 

Y después al alba mi gallo estará aún de abrumadora resaca porque es más gallina que yo pero mi despertador no padece de afonía y al despertar me doy cuenta que parezco la carta de ajuste que había antes cuando era niña y dormía y soñaba con los angelitos ya que mis padres estaban en el dormitorio contiguo y desde la cama escuchaba el espectáculo del mar de Riazor en todo su nocturno esplendor.