"A veces el grito del tiempo se escucha como si fuese el río del silencio y no existe razón para que ya no suenen sus palabras en su voz.
Justo lo que ocurre en algún lugar de un gran país,pese a que allí en las sombras mueren genios sin saber de su magia antes de nacer.
Y si puedes sentir que sopla hoy el viento más de lo normal no solo en este jardín de rosas que hay cerca de tu vieja escuela,aquella en la que te preguntabas cien gaviotas dónde irán sino también qué pasaba con las lágrimas en la arena mientras se esconde el sol para tener un sueño escocés o la causa por la que se rompió tu sonrisa de sangre azul cuando murió la luz.
Sin saber aún quién eres,dime tu nombre en el país donde parece que mueren las flores porque tengo solo la certeza que esos dos ojos negros no los quiero ver llorar,tan solo escuchar,a tientas,como si paseasen por una calle de París con tus palabras sin nombre.
Tú sabes quien quiso regalar la luna sin preguntar,la misma que puso una rosa gris en la barra de este hotel al lado de la casa azul en la cual respiraban casi todas las grabaciones olvidadas.
En nuestro mundo de cristal al caer la noche cuando llegue el fin de la tierra del amor,se verán señales en el cielo rozando la eternidad y entre salitre y sudor es donde estará el sentido de tu canción más que nada porque en el silencio,corre tu vida y en tu risa,se oye el mar.
Recuerda que no debes marchar ni abandonar por muchas piedras que haya bajo tus pies ya que fui yo quien le robé las horas al reloj por una apuesta al corazón para quedarme tan solo a un minuto de ti como uno de los personajes de la novela de Stevenson,ese Duncan Dhu por tierras escocesas".